¿Utilizas el secador y la plancha todos los días? ¿Acabas de hacerte algún tratamiento químico y notas tu melena más apagada o el pelo quemado? Si estás leyendo este artículo será seguramente porque llevas días notando tu melena más apagada, sin brillo y no sabes qué hacer para recuperarla.

Es fácil que el pelo se queme por el uso frecuente de aparatos de alta temperatura, como el uso del secador o de la plancha. Pero también influyen los productos químicos, las decoloraciones y coloraciones o incluso la exposición excesiva al sol.

Todos estos agentes eliminan progresivamente la humedad de la fibra capilar y el resultado son mechones apagados, ásperos y sin vida. Por suerte, este problema tiene solución. Tendrás que empezar un tratamiento para devolver los nutrientes perdidos y eliminar los posibles daños causados por la quemadura.

Cómo detectar el pelo quemado

En primer lugar y antes de comenzar con un tratamiento, hay algunos factores que te ayudarán a identificar si tu pelo está quemado o no.

¿Tu pelo se rompe con facilidad cuando te peinas? ¿Lo notas encrespado? ¿Ha perdido mucho brillo y tiene una textura áspera? ¿Te resulta difícil de darle forma? Si es así, efectivamente, tu pelo necesita un tratamiento de hidratación para volver a recuperar los nutrientes.

Tips para recuperar el pelo quemado

Una vez hayas identificado si necesitas un tratamiento de hidratación para tu pelo, ha llegado el momento de, en primer lugar, aprender a evitar este problema y, en segundo lugar, recuperar el brillo y vida de tu melena. ¡Espero que te sirvan de ayuda!

Reduce el uso del secador y plancha

Uno de los primeros pasos para volver a recuperar tu melena es reducir el uso de aparatos de calor como el secador y la plancha. Aunque los agentes externos también contribuyen, estos aparatos son los que en mayor medida se encargan de retirar toda la humedad de la fibra capilar e incluso quemarla.

Reduce el uso incluso una vez hayas recuperado tu melena. Además, recuerda aplicar siempre un buen protector término que proteja el cabello de la alta temperatura.

Protege el cabello de agentes externos

No son solamente los productos químicos y la plancha o secador lo que estropea el pelo. También otros agentes como el sol, el cloro o el agua de la playa quitan la humedad de la fibra capilar.

Por ello es aconsejable llevar siempre productos de protección a los rayos de sol. Serán, además, muy útiles para no quemarte el cuero cabelludo. También ayudará el uso de otros accesorios como sombreros o gorras.

Hidrata el cabello con aceites

Uno de los tratamientos que más va a agradecer tu cabello si está quemado es que le des una buena hidratación, por lo menos, una vez a la semana. Para ello usa mascarillas de aceite de argán, de joroba, queratina o cualquier otra proteína que hidrate el cabello.

Además de mascarillas, puedes echar mano de aceites capilares que te ayudarán a dejarlo húmedo por más tiempo. Para aplicarlo, cuando tengas el pelo aún mojado, aplica el aceite en las manos y repártelo por los mechones.

Reduce el número de lavados

Si tienes el pelo graso este paso te puede suponer mayor problema. Pero es necesario que durante el tratamiento reduzcas la aplicación de champú en el cabello quemado para que este pueda recuperarse con mayor rapidez.

Cuando nos lavamos el pelo perdemos la hidratación. Por ello no es bueno lavar el pelo todos los días. El consejo es lavarlo, al menos, cada dos días para mantenerlo hidratado durante más tiempo.

El champú que uses también es importante. Los mejores champús para tratar cabellos quemados son aquellos que tienen propiedades hidratantes que están creados a base de aceites, como de argán y oliva.

Capillo de cuerdas naturales

El pelo quemado suele romperse con mucha facilidad y estar lleno de frizz, pero esto se potencia todavía más si usas un cepillo de cuerdas sintéticas. Lo recomendable es, aunque no lo tengas quemado, usar cepillos de cerdas naturales.

También puedes usar peinas con púas más anchas para desenredar con suavidad el cabello. Los que tienen las púas muy juntas tienden a engancharse y enredar el pelo.

Corta las puntas

Cuando el pelo está quemado, las puntas son las que más sufren. Estas se quedan abiertas y con una apariencia poco saludable. En general, eliminar unos dos o tres centímetros de longitud será suficiente para mejorar el aspecto del cabello.

Si después de aplicar todos estos consejos continuas con el pelo quemado, tu peluquero será el que mejor pueda aconsejarte. Tanto con nuevos tratamientos como con nuevos productos que te ayuden a recuperar el brillo y la suavidad de tu melena.

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