El mundo de las manualidades es extenso, y a poco que ahondas en sus múltiples posibilidades no cuesta mucho encontrar el tipo de artesanía que más te conecta. La creatividad es algo innato, y a nosotros nos gusta especialmente la papelería. Por eso hoy queremos hablar de las increibles características del papel adhesivo.
El también llamado papel autoadhesivo o papel pegatina es una variedad muy concreta que consta de dos capas diferenciadas. Estas capas superpuestas se despegan permitiendo adherir la capa de celulosa a la superficie deseada. Detrás de un proceso tan sencillo se esconde una variedad de usos y características particulares.
Cuáles son las características del papel adhesivo
Comencemos por el principio. Lo que define al papel adhesivo de forma superficial no es mucho más que su capacidad de adherirse a casi cualquier superficie.
Este tipo de papel en estado nativo está compuesto por dos láminas. La primera es el soporte o revés de la hoja, y el otro es la cara frontal o papel propiamente dicho. La cara frontal presenta la apariencia de un film de celulosa convencional en el que su revés está tratado con una sibstancia adhesiva o engrudo. Ese revés se acosenta sobre el soporte permitiendo un sellado perfecto y las características óptimas para conservar esas propiedades adhesivas hasta el momento de su uso.
Mientras el papel adhesivo está unido en sus dos piezas, su resistencia y maleabilidad lo hacen adecuado para realizar todo tipo de manualidades o escrituras. Una vez empleado, desarrolla su máxima adherencia a los tres o cuatro días de haber sido pegado, lo que permite modificar su colocación durante un tiempo razonable.
Tipos de papel adhesivo
Que el concepto de papel adhesivo resulte sencillo no quiere decir que no exista una gran variedad de modelos con características distintas. El ser adhesivo es una de sus características, pero como papel, cuenta con infinidad de modelos y colores.
Tipos de papel adhesivo blanco
El papel de toda la vida, pero esta vez en su versión autoadhesiva. Color y resistencia tradicional, mate o satinado. Buen agarre y disposición adecuada para trabajos de oficina o papelería. La mejor opción para gran cantidad de utilidades.
Papel color adhesivo
Aunque no lo esperes, existe una variedad inaudita de acabados y tonalidades en la gama adhesiva. Desde los matices que otorga el blanco perla, reciclado u ópalo, a colores más vivos e intensos como los rojos, ambar, verdes o azules.
Cuentan también con su gama metálica, perfecta para los acabados más espectaculares. Estos incluyen los colores oro y plata con características idoneas para decorar y conseguir detalles de alta calidad en sus aplicaciones.
Papeles adhesivos de alta resistencia
Existen papeles adhesivos preparados para circunstancias especiales. Los primeros son las cartulinas autoadhesivas: un papel de un gramaje superior para los trabajos en los que necesitemos una rigidez extra, escogible en brillo o mate.
Otra variedad del autoadhesivo bastante interesante es el papel adhesivo de doble cara. Consta de una lámina central adhesiva por ambas caras y protegidas por dos soportes. Especialmente preparada para manualidades y scrapbooking.
Manualidades en papel autoadhesivo
Ya con esa serie de materiales en nuestras manos, podemos acceder a crear casi sin límites. Esta gama de papeles es genial para crear pegatinas, decorar libretas y agendas, construir estructuras imposibles de papiroflexia o crear tarjetas de felicitación para cumpleaños o situaciones especiales.
Sin duda, las características de este tipo de papel pueden resultar sorprendentes, sobre todo cuando hablamos de ser creativos. Ahí tenemos la oportunidad de realizar algo nuevo con los materiales de siempre.
